Imagen: losreplicantes.com |
Describo aquí el modo diría yo que bastante probable de... qué calzador usarán cuando decidan que 'nos lo van a meter': me refiero a ese final total y forzoso, sin derecho a elegir, del dinero físico o 'líquido', léase billetes y monedas.
Esto viene a ser un complemento de mi artículo anterior: El fin del dinero físico. Un guión de la élite bancaria. , el cual se inspiraba en un artículo de la web losreplicantes.com. Curiosamente la lectura de un posterior artículo de esa misma web me arrojó la 'iluminación' para comprender cómo -posiblemente- lo aplicarán en países del Sur como España, mucho más dependientes de eso que llaman la economía sumergida. Ese segundo artículo es:
Finlandia será el primer país del mundo en implantar la renta básica universal
Brevemente, mis conclusiones:
Dinero electrónico vs. físico. ¿La Europa del Norte vs. la del Sur? ¿Banqueros vs. personas humanas?
- ¿Cómo lograrán convencer a la gente del Sur de Europa de que se dejen imponer el 'digitalazo monetario', que acabará con cualquier forma de economía sumergida y de facturación 'en negro'? Y en verdad la Europa del Sur depende muchísimo de esto, cuando no de las pensiones de los abuelos o de los padres para sobrevivir. ¿Cómo? Pues... con el caramelo de la 'renta básica universal'.
No entiendo cómo no se me ocurrió antes, cómo no ligué ambos temas, candentes aunque desde lados aparentemente opuestos. Pero sin duda, y desde el maquiavelismo de quien quizá lo tiene ya diseñado, la idea, el engaño colectivo, resulta genial. No hará falta siquiera el argumento del terrorismo o de superponer la seguridad a la privacidad o a la libertad: se anunciará a la ciudadanía la implantación de la renta básica universal, a la par que la disolución total del dinero físico.
¿Cuánta gente, en esos países del Sur europeo, se resistirán a ese siniestro 'mix', aun intuyendo unos pocos que se trata de una trampa? A parte de un puñado de concienciados e intelectuales, muy poca gente. Algo parecido ocurrió ya, en esos mismos países del Sur, cuando caímos prácticamente todos en la trampa de la implementación de la moneda Euro, hace ya más de quince años, y tardamos al menos una década en comprender o intuir de qué iba ese robo a gran escala perpetrado desde altas instituciones, las cuales no eran más que extensiones de grandes grupos mafiosos cómodamente instalados en aun más altas esferas de ámbito planetario.
(...) si no existe el dinero físico, los ciudadanos estarán obligados a participar en el sistema financiero. Una cosa es que se deba fomentar que las personas más desfavorecidas tengan acceso al sistema financiero y, otra muy distinta, que nadie pueda elegir si participar de él o no.
(...) Por otro lado, parece demasiado optimista afirmar que la evasión fiscal se acabaría. El mayor porcentaje de dinero evadido parte de las grandes fortunas y las grandes empresas, que echando mano de la ingeniería fiscal dejan de pagar, legalmente, los impuestos que les corresponden. Los gigantes Google o Amazon son un gran ejemplo de esto.
De la misma forma, es bastante optimista pensar que las organizaciones criminales no obtendrán algún método de pago, similar al blanqueo, que les permita continuar delinquiendo sin que se conozcan sus verdaderas actividades.
Otro atraco o robo a mano armada, o estafa o burla en toda la cara por parte del sistema, vamos.
¿Por qué ahora el experimento de Finlandia?
Porque es justo eso: un experimento. Que durará dos años, dicen, y al que se dedicarán otros seis en analizar 'qué fue lo que pasó'. En mi modesta opinión, no tardarán tanto en aplicarlo -por la fuerza- al resto de Europa.
Porque se aplica a una sociedad muy, pero que muy habituada al uso de tecnología digital o electrónica -tarjetas de crédito, smartphones, etc.-. Mucho más que en los países del Sur.
Porque esa sociedad 'europea-norteña' -como ya apunté en mi anterior artículo- ha sido convenientemente des-sensibilizada, impedida desde su educación básica a sentir empatía hacia otros pueblos de la Europa del Sur, que desde esa misma cultura norteña son vistos como desidiosos, perezosos y aprovechados de la 'alta eficiencia o productividad' de los susodichos norteños.
Porque a esas culturas norteñas-escandinavas-hiperbóreas se les ha hurtado todo resto de pensamiento crítico: confían casi ciegamente en la bondad de 'papá-Estado', asumiendo sus ciudadanos la lógica siguiente: si vengo aportando al Estado la mitad o más -o bastante más- de mis ingresos en forma de impuestos ¿cómo no voy a creer que ese Estado va a velar por mi seguridad y mi bienestar, incluso por mi felicidad?
Y me pregunto yo: estos norteños que se prestan a tan terrible y descerebrado y anti-empático experimento... ¿cuándo dejaron en verdad de ser bárbaros? Quizá algun día hace tiempo y por un tiempo dejaron de serlo, o de considerarse a sí mismos como lo que eran, descendientes de los brutos vikingos, para considerarse los más punteros en civilización, en higiene -es decir el rechazo de los gérmenes-, en creación de nuevas formas de matar a gran escala, en otorgar premios a la excelencia de las ciencias a aquellos generalmente ajenos a su acomplejada, fría, austera, violenta, fanática, viciosa e hiperindividualista cultura. Pero ¿cuándo fue que regresaron a la barbarie?
Sólo espero que este asunto del fin anunciado del dinero físico -que preveo que nos meterán con vaselina usando el engaño de la esperanza en la renta básica universal- no contribuya a dividirnos más entre nosotros. Iba a decir entre nosotros los europeos. Aunque: ¿existe Europa como una construcción común? ¿O ya estábamos los del sur y los del norte claramente diferenciados incluso antes de esa entelequia que unos elitistas salvapatrias crearon y a la que llamaron Unión Europea? Nos salvaron quizás de otra gran guerra europea, pero diría yo que nos están llevando directamente a renovados viejos conflictos...
Casi ya estamos metidos excepto los que tengan todo su dinero en metálico debajo de la cama
ResponderEliminarLa primera respuesta es obvia y seguro ya la has escuchado: el dinero bajo la cama te lo pueden robar mañana. Y si es bastante, te lo van a robar seguro. Los criminales tienen ojos en todas partes.
EliminarLa segunda... Entiendo tu metáfora: buscar algún refugio o solución, para tu dinero o patrimonio, si es que te queda algo.
¿No habrá salida? ¿Aparecerá alguien con una solución intermedia, alternativa o incluso oficial? (Creo recordar que en Austria, no hace mucho, se experimentó con una especie de moneda mancomunal, y fue soportado por las instituciones regionales). Ésa es una buena pregunta.
Por cierto, he visto que en tu blog sobre informática abordas problemas relacionados con Windows 10: ¿puedes aportar algo sobre el cierre de puertos en ese S.O., como se plantea en el artículo de esta misma web?:
http://www.poralliresopla.com/2015/03/como-asegurar-windows-xp-cerrar-puertos-vulnerables.html?showComment=1497525430915#c3205383809251870188
Muchas gracias por comentar, Gonzalo!
De momento no lo veo viable, pero yo creo que hay que hacerlo de manera escalonada invitando a los usuarios y establecimientos a solamente utilizar tarjeta... Un pregunta, ¿y con los niños que ocurre? Ellos no tienen tarjeta de momento a no ser que les demos una prepago.
ResponderEliminarGracias por comentar, juan.
EliminarAunque no entiendo tu postura de invitar a usar sólo la tarjeta (¿qué pasa con el dinero en negro, estás por la supresión de la economía sumergida?) Aun entiendo menos tu velada sugerencia de que los niños tengan una tarjeta, da igual de pago que de prepago. ¿Vivimos en el mismo mundo?
Gracias igualmente por comentar!